La Dirección de Educación Pública -DEP- aprobó recursos para cinco proyectos emblemáticos de la provincia. Se trata de obras destinadas a la conservación y normalización de establecimientos educacionales dependientes del Servicio Local de Educación Pública -SLEP- Valdivia, por una suma de 1.019 millones de pesos.
Estas iniciativas, corresponden a la normalización eléctrica de Escuela María Alvarado Garay de Panguipulli ($305 millones), Conservación de Jardín Infantil Tralcancito de Los Lagos ($76 millones), Conservación Escuela Los Ulmos ($151 millones) y Conservación Escuela El Laurel ($333 millones), ambas de Valdivia, además de la Conservación Patio Cubierto Complejo Educacional Tierra Esperanza de Panguipulli ($153 millones). Los tres primeros proyectos comienzan su ejecución durante el presente año, mientras que los dos últimos consideran su comienzo de obras el próximo año.
Al respecto, el subdirector de Infraestructura del SLEP, Héctor Segovia explicó que “se trata de una muy buena noticia, ya que implica comenzar a abordar demandas que se han visualizado en el proceso de diagnóstico y que presentamos como proyectos prioritarios dentro de una cartera que estamos gestionando y trabajando durante este año”. Agregó que “la formulación y aprobación de proyectos es una de las líneas de trabajo que desde enero de este año ha estado desarrollando el SLEP. El proceso de elaboración y aprobación de proyectos de este tipo sigue desarrollándose de cara al presupuesto 2026, para seguir programando mejoras en nuestros establecimientos”.
TRABAJO COLABORATIVO
Producto de un trabajo conjunto y colaborativo realizado con la SEREMI de Educación de Los Ríos durante los últimos meses, el SLEP Valdivia ha obtenido aprobación de un incremento de recursos de 600 millones orientados a ejecutar trabajos durante el segundo semestre del presente año, así lo explicó el subdirector de Infraestructura.
Estos recursos irán directamente destinados a financiar una serie de situaciones relacionadas con las necesarias y urgentes mejoras en servicios higiénicos y sistemas sanitarios de los establecimientos educacionales, así como también los recursos necesarios para comenzar a desarrollar un plan de acción que permita iniciar la regularización de las instalaciones interiores eléctricas y de gas de nuestros establecimientos, de manera de cumplir con una de las principales obligaciones del sostenedor, que es la de disponer de instalaciones seguras y totalmente cumpliendo la norma vigente.