Navidad y Año Nuevo son festividades que reúnen a la comunidad y que invitan a compartir entre los seres queridos. Sin embargo, en muchas ocasiones también significan caer en excesos de alcohol o comidas, es por esto que la directora de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad San Sebastián sede Valdivia, Pamela Fehrmann, entregó las siguientes recomendaciones.
En primera instancia, la profesional sugirió respetar los horarios e intervalos de tiempos entre comidas, “es decir, mantener una ingesta entre 3 a 4 horas y así evitar la sobrealimentación, ya que tendremos a disposición alimentos que poseen una densidad calórica mucho mayor. Controlar el tamaño de las porciones de los alimentos, esto nos ayudará además a reducir perdida o desechos de alimentos”.
Dentro de los consejos, también se encuentra evitar o disminuir la ingesta de alcohol, prefiriendo las bebidas de bajo grado alcohólico. Así también sugirió considerar los jugos de frutas naturales e infusiones frías.
Otras alternativas a considerar son los snacks saludables. “Hoy existen muchas alternativas y recetas que nos permiten idear preparaciones de este tipo, evitando la ingesta de alimentos altos en azúcar, grasas, sodio y calorías. Es ideal que la última ingesta de alimentos sea al menos 2 horas antes de acostarse”.
Platos principales
Dentro de los alimentos que conforman la estructura de los platos principales para estas Fiestas de Fin de Año, Fehrmann explicó que aquellos incluyen una porción proteica que puede ser de origen vegetal o animal.
“Si corresponde a esta última, se sugiere que sea de bajo contenido graso y en ambos casos considerar una porción adecuada. Se sugiere buscar técnicas de cocción que no sean en base a frituras, preferir cocción a la plancha, horno, entre otros”, dijo la especialista.
En cuanto a los postres, Fehrmann recomendó que sean en base a frutas. “En la estacionalidad que nos encontramos podemos tener acceso a frutas muy apetecibles, ya que por su estructura química son de un gran dulzor, lo que las hacen ser muy atractivas, y además incorporamos a nuestro organismo una fuente valiosa de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes”.
Acompañamientos
Una importante porción de verduras fue la sugerencia de Fehrmann para los acompañamientos de las comidas en estas fiestas, considerando que “pueden prepararse en forma de ensaladas frescas o en alguna preparación con verduras cocidas, como un guiso o una tortilla. Es importante destinar tiempo a las preparaciones en base a verduras, buscar recetas, que nos entreguen alternativas no tradicionales para que estas sean atractivas al paladar”.
Las porciones ideales para los hidratos de carbono corresponden a ¾ de taza para arroz cocido, pure o ½ taza de quinoa, cuscús cocido y 1 o 2 unidades de papas pequeñas, por dar algunos ejemplos.
Dietas estrictas
Terminadas las fiestas, la profesional recomendó volver a la alimentación habitual, retomando los horarios de alimentación que corresponden a 4 servicios dentro del día, con un intervalo de 3 a 4 horas. También hay que adecuar el tamaño de las porciones e incorporar el mayor aporte de fibra y antioxidantes mediante la ingesta de frutas y verduras, además de frutos secos.
“La hidratación forma parte esencial de los hábitos saludables, ya que, dentro de las múltiples funciones en el organismo, optimiza el funcionamiento del metabolismo, la recomendación es de 8 vasos de agua al día”, agregó Fehrmann.
En caso de que las personas consideren que se excedieron en las fiestas y evalúen someterse a una dieta restrictiva, la profesional fue enfática en decir que “no es recomendable iniciar una dieta restrictiva o ayuno prolongado sin asesoría de un profesional nutricionista, ya que lo que debemos asegurar y propender es la disminución de tejido adiposo, sin embargo, muchas veces al realizar este tipo de dietas o restricción alimentaria se pone en riesgo la reserva de masa muscular.